viernes, 3 de julio de 2015

....

El calor me vuelve vago.

miércoles, 1 de julio de 2015

No soy nadie....

¿A quién pretendo engañar?
No soy más que aire y polvo en medio de una oscuridad infinita.

Puede que estas palabras escritas sean testimonio de que soy real, pero no de mi existencia. Nadie podrá demostrar jamás que he vivido, no sólo por el hecho de que llevo más que muerto demasiado tiempo, si no porque ya no queda nadie vivo que me conociera cuando mi cerebro aún palpitaba pensamientos y por mis venas corría la vida.

...

Creo que me estoy empezando a poner melodramático en exceso. Y seguramente eso se deba a la impotencia de estar aquí encerrado. Pero, sobretodo, se debe al hecho de quién fui. Observo mi reflejo y miro hacia atrás. ¿Y qué veo? A un idiota que ha tirado su vida por la borda.

Es bonito tirar cosas por la borda porque deduces cuánto te han pesado en la conciencia por el sonido que producen al caer al agua.


Ya sin irme por las ramas... La propietaria de la mente que me ayuda a seguir aquí día a día, pues a esa misma personita estúpida le soltaron el mítico sermoneo absurdo de "fíjate un héroe real y anímate a seguir sus pasos". ¿Y sabes en quién pensó? No en Lau, no...

En mí ←

Esa idiota pensó en mí.
Me reí de ella en su cara, obviamente. Pero es me hizo darme cuenta de que he sido un completo y absoluto negado.
Ya seriamente hablando, le dije que yo no era ningún héroe. En realidad eso lo dice porque no me conoce. No sabe lo que he hecho.
Llevo cinco años conviviendo con dos idiotas y ninguno sabe quién soy. Es gracioso e irónico al mismo tiempo.
¿Sabes por qué?
Porque ella se oculta del mundo y tampoco sabe nadie quién es (salvo Laurence y yo); la gente cree conocerla y sólo atisban un muro.
Y luego está Laurence. Nos engañó a ambos como a vulgares... ratas. Nos mostró quién era cuando lo conocimos. Y ahora, tras tantos años compartidos, resulta ser mentira. ¿Y qué suelta como excusa?

"Sólo os di un esqueleto para que os entretuvierais rellenándolo".

¿Qué saco con eso? Pues que somos unos completos extraños incluso para nosotros mismos.
Los tres llevamos un pasado a rastras.
Los dos no tenemos un lugar al que volver.
Y yo soy el único que lleva demasiado tiempo ignorando unos actos de los que debo arrepentirme.